El París Saint Germain-Real Madrid se presenta como el duelo estelar de los octavos de final de la Liga de Campeones, cuyo sorteo tuvo que ser repetido después de que varios equipos reclamasen la invalidez tras producirse dos errores en el primer intento.
El «problema técnico con el software de un proveedor de servicios externo» a la hora de la elección de los rivales hipotéticos de Villarreal y Atlético de Madrid, según justificó la UEFA, provocó que el proceso tuviera que repetirse después de que al conjunto madridista le tocase en suerte el Benfica, al PSG el United y al cuadro rojiblanco el Bayern Múnich, entre otros.