Muchas iglesias están explorando el metaverso y han encontrado en el mundo virtual una forma de enfrentar la ausencia de feligreses en los templos por la pandemia de covid-19, ofreciendo una experiencia inmersiva e innovadora sin salir de casa. Este es el caso de la VR Church, una comunidad espiritual con sede en Fredericksburg (Virginia, EE.UU.) que «existe completamente en el metaverso para celebrar el amor de Dios por el mundo».
La iniciativa fue fundada en 2016 por DJ Soto y ha ganado popularidad con el anuncio de Facebook el año pasado de enfocar sus esfuerzos en construir su propio universo virtual. «El futuro de la iglesia es el metaverso», aseguró recientemente en una entrevista este pastor cristiano, que afirma que su proyecto reúne tanto a personas tradicionalmente creyentes, como a quienes carecen de una afiliación religiosa específica.
Los devotos tienen la posibilidad de asistir a servicios cristianos tradicionales, como misas o bautizos, así como también a sesiones espirituales de meditación, todo ambientado en entornos hiperrealistas.