Este día se cumple un año de la aprobación del Régimen de Excepción y que ha sido una de las herramientas fundamentales para ponerle fin a las pandillas en El Salvador, grupos terroristas que por décadas quitaron vidas, dejaron luto y transformaron con violencia a la sociedad civil.
En la madrugada del 27 de marzo, la Asamblea Legislativa aprobó, con 67 votos a favor, dicha declaratoria amparada en los artículos 29, 30 y 31 de la Constitución de la República. Dicha decisión fue el inicio del fin de las pandillas en El Salvador, que por más de tres décadas habrían dejado unos 120,000 homicidios, incontables desaparecidos y muchísimos delitos.
Dentro de algunos logros que ha tenido, la exitosa estrategia de seguridad ha permitido reducir drásticamente los índices de criminalidad a escala nacional, contabilizando 330 días sin asesinatos durante la administración del Presidente Nayib Bukele.
Desde las acciones de la ejecución del Régimen de Excepción se contabilizan: 66,417 terroristas arrestados, 2,547 armas de fuego decomisadas, 3,292 vehículos incautados, 15,878 celulares y más de $3 millones que se han decomisado a los grupos criminales.