Países Bajos impuso este viernes, un cierre parcial de negocios después de que el gobierno ordenara que restaurantes y tiendas cerraran temprano y prohibió a los espectadores asistir a los principales eventos deportivos, en un esfuerzo por contener el rápido aumento de los casos de coronavirus.
«Las restricciones son inevitables”, dijo en una rueda de prensa el primer ministro neerlandés en funciones Mark Rutte, quien aseguró que «el virus se encuentra en todos lados, en todas las edades y en todos los sectores”.
De esta forma, las tiendas no esenciales deberán cerrar a las 06:00 p.m., mientras que supermercados, bares, restaurantes, cafés, clubes nocturnos al día siguiente de registrarse la cifra más alta de contagios desde el inicio de la pandemia, en marzo de 2020.
Las medidas entrarán en vigor este sábado y se aplicarán al menos hasta el 4 de diciembre e implicarán que las personas que acudan a bares, terrazas y restaurantes permanezcan sentadas en todo momento.
Asimismo, los eventos deportivos volverán a jugarse a puerta cerrada y no se permitirán espectadores, entre ellos el encuentro clasificatorio para el Mundial de Catar 2022 entre Países Bajos y Noruega el próximo martes en Róterdam.