La situación de la economía de EE.UU. ha caído a un mínimo histórico durante la presidencia de Joe Biden, según el índice de libertad económica anual de la Fundación Heritage. La puntuación obtenida este año, valoró el presidente de la fundación, Kevin Roberts, «pinta un panorama inquietante, tanto en el país como en el extranjero».
Parte de esta caída se debe al «declive de la libertad económica» en EE.UU., que es «motivo serio de alarma y tiene consecuencias reales y tangibles para todos los estadounidenses, especialmente para las familias de bajos ingresos y la clase trabajadora», sostuvo Roberts.
La valoración de EE.UU. descendió 2,7 puntos en el índice desde el año pasado, hasta un récord mínimo de 72,1. Además, el país cayó hasta su clasificación más baja a nivel global, desde el puesto 20 al 25.
Desde su primera edición en 1995, el índice de libertad económica de la Fundación Heritage evalúa a los países en función de valores como el estado de derecho, tamaño del gobierno, eficiencia regulatoria y apertura del mercado, al mismo tiempo que examina categorías específicas como derechos de propiedad, efectividad judicial, integridad gubernamental y cargas fiscales.